Por el motivo que sea, esperemos que nunca suceda, tu compañero peludo puede extraviarse. Si tu perro o gato se pierde, debes mantener la calma, y seguir nuestros consejos.
Si se pierde tu compañero no significa que seas una mala persona. Muchos perros se escapan cuando hay tormentas o tras la final de un partido de fútbol por culpa del estruendo de los petardos, por ejemplo.
En ocasiones, no está en nuestra mano el poder garantizar el bienestar de nuestra mascota. Por mucho que lo llevemos la veterinario, compremos correas anti-escape y los bañemos, puede ser que desaparezca nuestro gato o perro. Si es tu caso vamos a darte algunas pautas para encontrarlo.
No obstante, para evitar disgustos siempre aconsejamos la prevención. La previsión de no sufrir la angustia de una pérdida: ponle el microchip.
El primer minuto de su desaparición.
El primer paso es calmarse. Si te dejas llevar por tus nervios no sacarás nada en claro y afectará a la búsqueda de tu animal.
Llamar a las autoridades y organizaciones.
También, porque deberás tener una voz clara y firme cuando debas llamar a las autoridades de tu zona para denunciar la ausencia de tu mascota. Si sospechas que te han robado al perro/gato deberás presentarte a una comisaría y tramitar la denuncia.
Este punto es importante y obligatorio para todos aquellos que acompañen a Perros Potencialmente Peligrosos (PPP). No olvides de llamar a los veterinarios, por si se extravió y una alma caritativa lo llevo para saber si tenía microchip, protectoras de animales, perreras y centros de recuperación animal de tu zona y alrededores.
También deberás avisar a los servicios de mantenimiento de carreteras, recogida de basuras. Tu perro, al tener hambre, acudirá a los contenedores de basura en busca de comida, así que pasa su foto a barrenderos de la zona. Si hay en tu zona algún Colegio Veterinarios no dudes en llamarlo, es normal que en sus boletines salgan anuncios de perros robados acompañados de una fotografía.
Al último que debes avisar, si le has puesto a tu perro el microchip, es al registro. Ellos estarán avisados cuando algún veterinario llame para solicitar la información que lo acompaña.
Primer barrido de la zona dónde lo viste por última vez.
Después de haber llamado y avisado a todos, recorre la zona donde se perdió a pie o en vehículo despacio varias veces, llamándolo por su nombre. Podría esconderse por miedo a algún ruido que le hizo escapar.
Si tu perro tiene terror a ruidos fuertes, lo mejor será que lo llames por la noche, cuando hay menos alboroto. Llévate uno de sus juguetes con sonido, lo reconocerá y podrás descansar a ratos la voz.
Si tienes otro perro, llévalo (atado, para evitar que si se encuentran se te extravíen los dos) y procura que ladre. Si vives en un vecindario con okupas preguntales si lo han recogido, no te lo han robado. Seguramente lo encontraron y recogieron para no tener que llevarlo a la perrera.
Los perros perdidos en zonas rurales tienen menos probabilidades de regresar a casa. Este porcentaje aumenta si se trata de zonas de interior de España, con el concepto de la caza más arraigado. El motivo es que los cazadores a veces terminan con la vida del perro abandonado. Piensan que son silvestres o por acabar con su sufrimiento.
Se debe de ir ampliando el radio de búsqueda, además de variarlo, porque cabe la posibilidad de que un turista haya recuperado tu perro y lo montó a su coche. Tu perro, entonces, no estará en tu ciudad o municipio, sino en el de quien lo ha rescatado. También, deberíais informarte sobre el sistema de recogida de animales de tu zona. Hay pueblos que no disponen de este servicio, por lo que lo suplen con la subcontratación de empresas privadas o perreras de los alrededores.
Después de avisar, cuelga carteles.
Cuando hayas avisado a todas las instituciones, haz carteles. No lo cargues con demasiado texto, porque lo importante es su imagen, para que lo reconozcan, su nombre y tu teléfono para que te llamen si alguien localiza.
Siempre deberá resaltar más la fotografía que la tipografía. Utiliza una foto donde se le reconozca. El espacio de los carteles se dividen para ser legibles y atrayentes de la siguiente manera:
- La fotografía es el reclamo para acercarse a leer. En color es mejor que en blanco y negro.
- Los datos de contacto han de ser claros. Siempre deberá haber un numero de teléfono, podría hasta un correo electrónico, para que seas localizable.
- Una pequeña proporción para otros datos o información complementaria que creas importante, como puede ser su sexo, raza, edad, peso, color, si se escapó con collar y correa, alguna marca específica o miedo a los desconocidos (para evitar que alguien lo coja y sólo de el aviso). Siempre deberá ser de un tamaño mucho menor al resto del cartel.
- Puedes, o no, ofrecer una recompensa. Atraerá más la atención. Pero, cuidado, nunca pongas la cantidad exacta, para evitar interesados y potenciales estafadores.
Cuando tengas los carteles imprimidos en color deberás colocarlos en zonas estratégicas, para que lleguen al mayor número de personas. Las mejores zonas siempre serán las de tránsito cotidiano. Los bares de tu vecindario y donde se perdió el perro o gato, supermercados, clínicas veterinarias, panaderías, colegios, semáforos, paradas de autobuses o cerca de medios de transportes públicos, estancos, restaurantes, gasolineras,…
Los medios de comunicación locales.
Otra alternativa, ya no tan recorrida, es llamar a la prensa y las emisoras o radios, siempre locales. Nunca un medio generalista se hará eco de un perro perdido, en cambio en las pequeñas locales sí. También en las revistas semanales o trimestrales de los ayuntamientos. Algunos locales de barrio editan sus propias revistas, las cuales puedes preguntar si colgaran algún cartel tuyo. El caso de Goofy no solo se anunció en redes sociales, sino también en el diario local de Tarragona.
Difundir el caso por las redes sociales.
En esta era tecnológica la comunicación es más fácil, por ello debemos aprovecharnos de estas herramientas para nuestro propio beneficio. Las redes sociales juegan un papel vital en la localización de perros perdidos. Sin embargo, siempre que des datos en Internet debes dejar un numero de teléfono, nunca dejes que te escriban un correo electrónico.
Beneficia te de todas las páginas de Facebook dedicadas a los animales perdidos. Desaconsejamos preguntar a aquellas de temática veterinaria, por ejemplo, o de juguetes para perros, porque te puedes encontrar con que no te respondan nunca.
Además, hay algunos errores que se repiten por las redes sociales. No obstante, hemos señalado los más comunes.
Cuando no hay más que hacer.
No desesperes, la media para recuperar un animal es de 10 a 15 días. Recuerda que es una estimación, no una fecha límite. Sobre todo, porque hay miles de variables que, por culpa de tu nerviosismo y estado de ánimo, no se tienen en cuenta.
A lo largo de mi vida he podido ver cómo han desaparecido, extraviado y robado miles de perros, gatos, algún que otro animal exótico y hasta caballos. Los propietarios de animales perdidos no están en su mejor forma, ya que el estrés y la angustia se apoderan de ellos. Siempre recomiendo no perder la esperanza. Soy testigo de muchos animales recuperados tras meses o años. El caso que más me chocó fue el de Inca una perra mestiza, que desapareció cerca de Barcelona, y al cabo de un año apareció en Italia.
Cuando nunca aparecerá.
Pero soy realista y nunca os mentiré. También puedo atestiguar de animales nunca encontrados, caídos al olvido por los amigos y las redes sociales. Una conocida perdió su perro en Francia y después de varios años se dio por vencida.
Quiero puntualizar que, si se trata de un robo, además de denunciarlo como había comentado más arriba, deberemos de ahorrarnos algún dato sobre el animal. ¿Por qué? Para evitar ser estafados por algún desalmado que intenta conseguir la recompensa, si es que habéis detallado en el cartel.