Cómo juntar dos cobayas

¿Has decidido adoptar otra cobaya? ¿No sabes cómo se lo tomará la que ya tienes? Te decimos cómo has de juntar las correctamente.

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Los conocidos cuyos son animales sociables pero si sabes cómo incorporar lo a la familia.

La convivencia entre cobayas es llevadera si saber cómo incorporar a nuevo miembro adoptado de la familia. Pero, ¿puedes llevarse bien dos conejillos de indias de diferente raza? Sí, es posible y te decimos cómo hacerlo.

Podemos aunar varios cuyos, pero hay una excepción.

Es viable poder juntar varios pequeños de diferentes razas. Sin embargo, deberemos prestar atención cuando se tratan de machos. Si son dos ejemplares machos deberemos tomar medidas al respecto, más severas que si fueran dos hembras o una pareja.

Antes de meterlo en la jaula, debes presentarlos.

En cualquier caso, deberemos llevar a cabo un proceso necesario para que se conozcan sin tensión. Lo que significa, que nunca meteremos directamente al nuevo miembro en la jaula con nuestro animal.

Los dos animales se deberán conocer fuera de la jaula en un espacio neutro para nuestra cobaya, como puede ser el cuarto de baño o una habitación de la casa que nunca haya pisado. Deberás estar atento a que los animales estén tranquilos durante la presentación para que no asocien la presencia del otro a un acontecimiento negativo.

En ningún caso meteremos dos jaulas una contra la otra, ya que puede generar conflictos de territorialidad entre ambos. Ni se te ocurra poner una jaula frente a la otra para que se conozcan, puedes generarlos más estrés, tensión y rivalidad al reconocer otro animal cerca de su zona de confort.

Tener una cobaya es como celebrar cada día una fiesta.

Durante 15 días deberán hacer actividades juntos para que se vayan acostumbrando. Lo más recomendable es darle de comer, de esta manera lo asociarán algo positivo y hará más llevadera la transición a una jaula, si así lo deseáis.

Después del período de transición, puedes llevar al nuevo miembro a que conozca la jaula. Lo recomendable es que sea una jaula nueva y que haya dos camas para cada uno, donde se palme que el conflicto por necesidades primarias sea cero. Podéis empezar por dos jaulas pequeñas, para acabar con una jaula más grande donde haya capacidad para las dos sin que estén muy apretujadas.

Juntar dos machos.

Si has decido tener dos machos has de estar preparado para que corra la sangre si no los has castrado.

Las cobayas son animales sociables, pero los machos suelen ser más territoriales, por lo que hay más peleas entre ellos por el territorio o la disputa por una hembra.

Lo único que puedes hacer en este caso, si quieres que se lleven bien, y tu vida no sea una amargura, será castrarlos a los dos. Si tienes pensado hacer crías te comprometes a tener un macho entero apartado de por vida, o acompañado de la hembra reproductora, en una estancia diferente para no crear tensión ni estrés a los animales.

Juntar dos hembras.

La relación entre hembras es distinta, el conflicto se puede dar al principio de conocerse, pero a la larga se acostumbran y el conflicto será nulo.

Si no quieres tener crías, lo mejor es solo adoptar hembras en tu grupo y llevar acabo el proceso de presentación que hemos mencionado anteriormente.

Juntar una pareja, para tener crías.

Si quieres tener crías, lo mejor es una pareja. En este caso el conflicto es inexistente. Pero atención, estar preparados para ser familia numerosa, porque las camadas son de 2 a 6 crías.

¿Conoces las diferentes razas de cobayas? Existen con pelo, sin pelo, más grandes,..

El macho elegido no deberá ser más grande que la hembra, porque de lo contrario las crías serían de un tamaño muy elevado y complicaría el parto, hasta causar la muerte a la hembra. La edad óptima para hacerla copular deberá ser entre los 8 meses y menos de 10, aunque es madura sexualmente a partir de los 2 meses de vida.

El celo de la hembra se da cada 16 días, por lo que en ese tiempo deberá vivir en la jaula del macho. La fecundación se da en las primeras 12 horas del celo. La gestación es entre 60 y 70 días, y como resultado nacen de dos a seis crías.

Sabiendo estos datos, lo que recomendamos es castrar a los machos y tener hembras en el grupo, para frenar el abandono animal que existe en nuestro país.

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